La figura del Delegado o Delegada de padres y madres es nueva en nuestro sistema educativo, aunque no lo es en otros países como Francia en el que la legislación escolar ya los contempla y actúan como intermediarios entre la familia, la dirección o la administración del centro. Desde CODAPA somos conscientes de que una figura de este tipo no funciona sólo porque tenga un aval legal, sino porque la comunidad educativa en su conjunto y, en especial, los padres y las madres le demos el reconocimiento, el protagonismo y la vitalidad que consideramos necesaria para que su colaboración con el profesorado contribuya a que nuestros hijos e hijas tengan cada día una educación de mayor calidad.

Por ello, se ha editado «Delegados y delegadas de padres y madres. Organización y funcionamiento en los centros educativos», un documento que intenta servir de base y orientación, en primer lugar, a todos aquellos padres y madres que han sido elegidos como delegados y delegadas en su grupo-aula y quieren tener claras sus competencias, sus responsabilidades, con quienes debe coordinarse y para qué, etc. Por otra parte intentar servir de orientación, a los equipos directivos y al profesorado en general, para incorporar esta figura en la estructura, tanto orgánica como funcional de los centros, desde una idea base: la educación es una tarea compartida, en la que sólo se consigue éxito y calidad con el esfuerzo de todos y todas: alumnado, profesorado y familias.